Las nuevas generaciones cambiaron la forma en la que se relacionan con el trabajo y su plan de carrera en las organizaciones respecto a lo que pensaban y hacían sus antecesores. Si bien ya lo veníamos vislumbrando con los millennials, luego de la pandemia se empezó a ver con más fuerza en la Generación Z, los últimos que se incorporaron al mercado laboral. ¿Por qué nadie quiere ser jefe? ¿Qué cambió en las nuevas generaciones? ¿Qué motiva hoy a los jóvenes? ¿Cómo influye la salud mental? Son varias las cuestiones que llevaron a ver esta tendencia cada vez más firme, pero sin duda el balance vida personal y laboral y el cuidado de la salud mental son las cuestiones que más esgrimen los jóvenes que rechazan puestos de liderazgo o mandos medios. Estamos en una etapa donde el foco está en “trabajo para vivir”, y no más en el “vivo para trabajar” que dominó décadas.
QUÉ BUSCAN LAS NUEVAS GENERACIONES
Si bien nada es absoluto y hay jóvenes que sí quieren una carrera profesional dentro de las corporaciones, los datos invitan a reflexionar y a pensar quizás un nuevo escenario con una nueva cultura laboral. Según un informe del 2024 realizado por la consultora británica Robert Walters y tomado por el conocido diario The Guardian, más del 52% de la Generación Z (aquellos nacidos entre 1996 y 2010) no quieren acceder a puestos de mandos medios o jefaturas. Estos datos corresponden a Inglaterra, pero se extrapolan a varios lados del globo.
Los Z son una generación que prioriza fuertemente el work-life balance (equilibrio entre vida laboral y personal) y está atenta a su bienestar emocional y mental. Además, entiende formas alternativas al éxito como emprendimientos propios o trabajar en organizaciones con propósito. Otra característica es que el sueldo no es lo que más pesa en la balanza. ¿Un dato más? Aquellos jóvenes que sí tienen una intención de hacer carrera corporativa no lo harían a cualquier costo. El formato híbrido es clave para cualquiera de los consultados.
Este desinterés por acceder a cargos jerárquicos ha dado lugar al término “conscious unbossing” (desjerarquización consciente), una adaptación del conocido “conscious uncoupling” que popularizaron Gwyneth Paltrow y Chris Martin para anunciar su amistosa separación.
Es importante tener en claro que no se trata de que la generación z es vaga y no quiere trabajar o asumir responsabilidades. Se trata de establecer límites para cuidarse y vivir mejor, poniendo el foco en el cuidado integral de su salud (física y emocional) y en su vida personal. Queda claro que necesitan flexibilidad y que tienen otras prioridades.
¿QUÉ ROL TIENEN LAS EMPRESAS?
Más allá de esta tendencia, las empresas saben que la gestión media sigue siendo clave al menos hoy: los jefes o líderes intermedios despeñan un rol vital y crucial en las organizaciones. Por lo tanto, ¿qué se puede hacer para volver a atraer a las generaciones más jóvenes a ocupar cargos de liderazgo? Compartimos algunas sugerencias…
- INNOVAR PARA ATRAER. Las organizaciones tienen que buscar la forma de llamar su atención. Tienen que llevar adelante estrategias innovadoras que permitan hacer más atractivos estos roles.
- BRINDAR AUTONOMÍA. Es importante que los líderes medios tengan autonomía en sus decisiones. La falta de autonomía es una queja recurrente de las nuevas generaciones. Esgrimen tener el título de jefe, pero sin autoridad real en la toma de decisiones.
- OPORTUNIDADES DE CAPACITACIÓN Y MEJORA. Dar la posibilidad de capacitarse en sus roles: gestión de equipos, liderazgo, habilidades blandas, etc.
- EVALUAR CONTINUAMENTE LA CARGA DE TRABAJO. Esto es vital para evitar el famoso “burnout” y que los líderes puedan lograr el deseado equilibrio entre vida laboral y profesional.
- DAR RETRIBUCIONES Y BENEFICIOS ACORDES AL PUESTO. Desde premios y bonos, días libres, hasta momentos de relax y bienestar emocional.
- ACOMPAÑAR EL CUIDADO DE LA SALUD MENTAL. Con profesionales en la organización y externos que puedan hacer seguimiento.
Las organizaciones deben tener en claro este nuevo escenario: la generación z es fuerza laboral en crecimiento de la cual hay que nutrirse. Es importante, de aquí en más, diseñar estrategias para atraerlos.