Descubrí la respiración consciente.
CÓMO FUNCIONA LA RESPIRACIÓN
Desde la biomecánica, es decir el cuerpo físico, existen 3 tipos de respiración:
- Respiración superior: abarca el tercio superior del tórax, las costillas superiores y la clavícula.
- Respiración media: abarca las costillas medias.
- Respiración inferior: abarca el borde inferior de las costillas, el diafragma y el abdomen.
Cuando realizamos una respiración completa (con los 3 tipos) la respiración se da de manera profunda. En general se inhala por nariz y se exhala por nariz, pero si queremos ampliar la exhalación debemos largar el aire por la boca.
¡A PONERLO EN PRÁCTICA!
¿Cómo se practica? ¿Cuáles son sus beneficios principales? ¿Se puede hacer en cualquier lugar? Gigante asegura que la respiración consciente es una herramienta que se puede utilizar en cualquier momento del día y lugar, pero que es especialmente útil en el trabajo cuando sentimos emociones negativas o que algo nos perturba y necesitamos aquietar y conectar con el sentir. Se puede sumar a las pausas activas o simplemente sentarnos en una silla con la espalda recta y los pies apoyados en el piso, cerrar los ojos y respirar desde un estado presente. “Como estrategia sugiero que cuando tengamos una pausa, por ejemplo en el momento del almuerzo, salgamos al contacto con la naturaleza y aprovechemos ese tiempo para realizar un ayuno de los sentidos y la tecnología. Sentarnos con la espalda derecha, ojos cerrados y sentir la brisa y los sonidos del exterior. Luego, inhalar por nariz –visualizando que el aire vital o prana ingresa desde la base de la columna hacia la cabeza– y exhalar desde la coronilla hacia el sacro coxis”, explica la especialista y nos sugiere dos tipos de prácticas.
Un opción es realizar la respiración consciente a través de la repetición de un mantra (vibración). ¿Cómo? Repetimos “SO” en la inhalación y “HAM” en la exhalación. Se sugiere realizarlo, como mínimo, por un tiempo de dos minutos.
Otra alternativa es la respiración alternada por nariz. Colocar el pulgar derecho en la narina derecha y el anular en la izquierda. Poner el dedo índice y el mayor en el entrecejo. Inhalar por narina izquierda, taparla y exhalar por derecha. Luego, inhalar por derecha, tapar y exhalar por izquierda. Este es un ciclo completo. Realizarlo de 5 a 10 veces. “Esta técnica nos predispone para una jornada laboral más positiva. Enfoca la mente. Es muy buena también para las cefaleas y antes de comer, para lograr una buena digestión. Ayuda a la absorción del prana o energía vital en la región de la cabeza”, concluye la especialista.