DIETA MONÓTONA Y CON DÉFICIT NUTRICIONAL

Los argentinos, en general, comemos mal. Si bien cada vez hay más conciencia, la gran mayoría, seguimos comiendo poco variado y eligiendo alimentos de baja calidad nutricional. Estas no son meras observaciones, sino datos reales que se desprenden de estudios recientes y que se presentaron en el marco del Programa “Comer Mejor” impulsado y desarrollado en forma conjunta por la Universidad Católica Argentina (UCA) a través de su carrera de Nutrición, el Centro de Estudios sobre Políticas y Economía de la Alimentación (CEPEA) y la Red Argentina de Bancos de Alimentos (RedBdeA), con apoyo de un grupo integrado por destacados profesionales. ¿El objetivo de esta iniciativa? Promover la educación alimentaria y nutricional. En resumen, un cambio dietario, mejorar la calidad y diversidad de la alimentación de las familias argentinas y educar para una correcta comprensión del etiquetado frontal de alimentos.

---

DATOS CONCRETOS

La dieta promedio de la población argentina es poco diversa (4,48 puntos en una escala de 10), de baja calidad nutricional (solo el 11 % de la población tiene una buena calidad de alimentación) y poco sustentable (en particular por la emisión de gases de efecto invernadero). Es imperioso entonces realizar un cambio dietario por dos razones bien contundentes: salud humana y ambiental.

Antes estos números, el propósito de “Comer Mejor” es producir cambios sostenibles que mejoren las brechas de calidad nutricional y diversifiquen la alimentación de la población argentina considerando sus diversas particularidades. La información educativa está disponible en las redes sociales y en la plataforma web comermejor.com.ar.

---

¿QUÉ COMEMOS?

Los grupos alimentarios más deficitarios en la dieta argentina, pero que a su vez representan una fuente importante de nutrientes esenciales son las verduras, frutas, legumbres, granos, cereales y harinas integrales, yogur y alimentos fermentados.

En contrapartida nuestras primeras elecciones son la papa, el pan blanco, el pollo, la leche, la cebolla, el azúcar, la banana, el arroz, los fideos y la harina de trigo. Además, las bebidas dulces y las infusiones (en particular el mate dulce) lideran el consumo de azúcar en la dieta, seguido de las galletitas.

En cuanto a las brechas alimentarias (la diferencia entre los consumos recomendados y lo que realmente consume el adulto promedio), estas pueden ser deficitarias o por exceso. En ambos casos, muestran un aumento a medida que sube el nivel de ingresos.

---

¿CÓMO COMER MEJOR?

Con pequeños pasos cada día. Sumar una nueva verdura al mes, agregar al menos cinco nuevas frutas al año, reemplazar alguna harina o fideo por una opción integral o de legumbre. Incorporar algún fermentado una vez a la semana. Reducir el consumo de azúcar, por ejemplo, optando por una bebida amarga. Comprar bolsas de verduras agroecológicas, para primero asegurarnos comer productos de estación y cocinar lo que nos toque, no lo que elegiríamos en la verdulería. Pequeños hábitos para corrernos de la dieta monótona y poco variada nutricionalmente.

También es importante ser agentes multiplicadores de este mensaje y compartirlo con nuestros contactos

Fuente: Prensa UCA y comermejor.com.ar